La Sociedad Española de Medicina Estética (SEME) y la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) han emitido un comunicado conjunto para denunciar el preocupante aumento del intrusismo profesional en el ámbito sanitario, con especial incidencia en la medicina estética y la ginecología.
Ambas entidades advierten sobre la proliferación de tratamientos médicos realizados por personas sin la titulación, formación ni competencia legal necesarias. En medicina estética, señalan la expansión de centros no sanitarios y ofertas engañosas, donde se llevan a cabo procedimientos invasivos por individuos sin cualificación médica ni sanitaria.
La situación se extiende también a la ginecología y obstetricia, donde se ha detectado la realización de ecografías obstétricas, indicaciones hormonales y técnicas invasivas por personal no facultativo, vulnerando la legislación sanitaria vigente y comprometiendo la seguridad de los pacientes.
SEME y SEGO reclaman una actuación urgente por parte de las autoridades sanitarias, incluyendo el cierre de centros que operen al margen de la legalidad, campañas informativas dirigidas a la población, y la persecución legal de prácticas fraudulentas.Las consecuencias de esta práctica ilegal pueden ser graves: complicaciones clínicas, efectos secundarios no controlados, errores diagnósticos y pérdida de confianza en el sistema sanitario.
SEME y SEGO reclaman una actuación urgente por parte de las autoridades sanitarias, incluyendo el cierre de centros que operen al margen de la legalidad, campañas informativas dirigidas a la población, y la persecución legal de prácticas fraudulentas. Además, llaman a reforzar la ética profesional y apoyar a los sanitarios que denuncien estas situaciones.
“Proteger la medicina es proteger la salud”, concluyen ambas sociedades científicas, que instan a instituciones y profesionales a unirse en defensa de la seguridad del paciente y la integridad del ejercicio médico.