Los rellenos dérmicos falsificados han aparecido en el mercado poco después de que se generalizaran los genuinos. Desde los esteticistas ilegales que utilizan rellenos ilegítimos, hasta los consumidores que compran falsificaciones en línea y se inyectan a sí mismos, ¡sí!, has leído bien, esto es cierto, el daño está hecho, y el que se puede infligir al paciente, muy, muy alto.

Tanto en 2015 como en 2017, la FDA ya emitió una advertencia sobre el botox falso y rellenos dérmicos inyectables 'de imitación' en el mercado. Las falsificaciones no están reguladas en ningún caso y son potencialmente mortales. Lamentablemente, esta tendencia sigue en aumento: los médicos en Escocia, por ejemplo (las falsificaciones llegan a todo el mundo), advirtieron recientemente contra la venta de bótox falsificado en las redes sociales.

Rellenos falsificados, un problema fatal

Si bien todos los cosméticos falsificados tienen el potencial de ser dañinos, algunos pueden ser realmente mortales. El bótox falso y los rellenos han causado hospitalizaciones, parálisis e incluso la muerte de decenas de personas en los últimos años.

El botox y los rellenos representan hoy en día una industria multimillonaria, y cuyo mercado no sólo parece más joven, sino que se está volviendo más joven.

Esto ha llevado a la FDA a emitir advertencias oficiales instando al consumidor a someterse sólo a tratamientos de manos de profesionales capacitados y a examinar cuidadosamente las instituciones, clínicas y consultas, basadas en certificaciones. Sin embargo, el problema no parece haber desaparecido. El año pasado, la Aduana de los Estados Unidos se incautó de bótox falsificado por valor de 35.000 dólares en Cincinnati.

A lo que se une otro problema. La toxina botulínica falsificada es cada vez más difícil de detectar. Los profesionales pueden ser engañados en la compra de tratamientos cosméticos que pasan por legales, cuando no lo son y muchos hablan después de malas experiencias y efectos secundarios sin precedentes.

Este tipo de casos son perjudiciales tanto para los consumidores como para las marcas de relleno y botox, pero más perjudiciales son los casos que no se denuncian y no se descubren, lo que le da alas a la industria sumergida de las falsificaciones.

Falsificaciones estéticas en auge, sobre todo a causa de la ciberdelincuencia

Los cosméticos falsificados copian productos de marca genuinos utilizando el mismo embalaje que las marcas comerciales con el fin de engañar a los consumidores en las compras, por lo general con un incentivo de un precio con descuento. Sin embargo, debido a que se crean ilegalmente, no están regulados, por lo que pueden y a menudo contienen muchos ingredientes dañinos, incluyendo plomo, mercurio e incluso cianuro.

Para 2022, se prevé que la industria mundial de la falsificación valga 4,2 billones de dólares.

Según los datos de Red Points, el número de cosméticos y perfumes falsificados en línea se encuentran en un máximo histórico desde la pandemia del Covid-19, con un 74,14% de las marcas de cosmético que van en aumento en la ciberdelincuencia.

La realidad del mercado de cosméticos falsos es que están en todas partes, una simple búsqueda en línea en Google, eBay o Facebook, entre otras plataformas de similar naturaleza, revela una horda de paletas de sombras de ojos y labiales bestseller sospechosamente baratos, perfumes de diseño, cuidado de la piel y tratamientos de todo tipo que en realidad son falsos, burdas imitaciones.

Cómo evitar productos de belleza ilegales

El bótox y los rellenos representan hoy en día una industria multimillonaria, y cuyo mercado no sólo parece más joven, sino que se está volviendo más joven. Los datos muestran que el grupo de edad de entre 19 y 34 años representa ahora más del 17,5% de los pacientes que consumen botox. A medida que el mercado se llena y más usuarios buscan descuentos, la educación sobre este tema es vital.

Entre algunas recomendaciones para la profesión médica, está la de que permitan a los pacientes mirar el embalaje de las cajas del medicamento cosmético que se va utilizar y comprobar si hay un holograma que garantice su autenticidad (aún así este puede ser también falso, una reproducción ilegal).

Debería a su vez poder comprobar la descripción de los ingredientes. OnabotulinumtoxinA es el ingrediente aprobado por la FDA. Si encuentras toxina Botulinum Tipo A u otras palabras en su lugar, se debería sospechar.

Si bien todos los cosméticos falsificados tienen el potencial de ser dañinos, algunos pueden ser realmente mortales. El bótox falso y los rellenos han causado hospitalizaciones, parálisis e incluso la muerte de decenas de personas en los últimos años.

Todos en la industria, profesionales, distribuidores, consumidores y fabricantes y marcas por igual tienen la responsabilidad de poner fin a la falsificación de cosméticos. Y los pacientes interesados en los rellenos deben tomar todas las precauciones posibles para encontrar profesionales médicos que garanticen el procedimiento, sin fijarse exclusivamente en el precio o la oferta.

Las marcas y los minoristas están empezando a hacer grandes esfuerzos para que los productos genuinos sean verificables -desde hologramas hasta códigos de barra de serie- y estos deben continuar con énfasis la labor de ofrecer productos de calidad en lugar de grandes descuentos.

En última instancia, para vencer a la falsificación de sus propias marcas, la industria de cosméticos necesita ser proactiva en el seguimiento, acoso y derribo de falsificaciones en línea. La mejor solución de protección de la marca puede ser detectar falsificaciones en una amplia gama de canales on-line, rastreando su IP.









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