Piernas y pantorrillas, objeto de deseo

¿Quién no desea una piernas perfectas?

Pero las piernas, son quizá para muchas mujeres, uno de sus principales quebraderos de cabeza. "El hundimiento de la cara interna del muslo, o el exceso de grasa, que incluso puede causar molestias de roce al caminar", son algunas de las alteraciones que más las afean, nos adelanta el Dr. Pérez de la Romana. "Las rodillas también es otra zona que tiende a acumular grasa, así como los tobillos. Las alteraciones estéticas en las piernas ocasionan a menudo complejos psicológicos en las personas afectadas, que para disimularlo suelen vestir con ropa larga y ancha, incluso en verano, impidiéndoles disfrutar de la piscina o la playa".

Cada vez más personas acuden a la consulta del cirujano plástico en busca a poner solución a sus problemas con esta parte del cuerpo, que además la mujer desea lucir perfecta sobre todo con la llegada de la primavera y el verano, cuando se destapan con la desaparición de las medias.
Otra principal preocupación es "la forma de las pantorrillas, tanto por su exceso como por su defecto de volumen".

Por defecto

Cuando se da una falta de desarrollo de las pantorrillas, Federico Pérez de la Romana, explica que provoca un efecto bastante feo y antiestético en las piernas, "al hacerlas parecer muy delgadas y separadas, incluso arqueadas". El experto comenta que la mayoría de las veces, "la causa de esta deformidad es genética, ya que suele afectar a ambas piernas, y además es común observar el mismo patrón en las piernas de distintos miembros de la familia. En ocasiones esta deformidad se produce porque existe un crecimiento anómalo de los huesos y hace que las piernas se arqueen. Sin embargo, cuando se presenta en una sola pierna, la causa más probable suele ser un traumatismo o una enfermedad".

¿Cómo corregir entonces las piernas arqueadas? La cirugía estética y en este caso, Pérez de la Romana, indica la colocación de prótesis de silicona especiales para la zona, que dan más volumen a las pantorrillas y mejoran notablemente la figura. Aunque en la actualidad, "también se está optando por realizar una infiltración de la propia grasa corporal, para modelar adecuadamente toda la pierna".

Hablamos así lipofilling o relleno graso, en el cual, el cirujano es un especialista. "Los pacientes obtienen doble beneficio, ya que se eliminan los acúmulos de grasa no deseados de otras zonas, para conseguir una proporción en las piernas y pantorrillas. Pero para realizar esta técnica debe contarse con suficiente grasa corporal. Por ello, en los casos en los que no se tenga demasiada, se opta una técnica mixta, utilizando prótesis para aumentar el gemelo e injertos grasos, que proporciona unos resultados muy satisfactorios". Esta intervención sólo requiere de anestesia epidural.

Dependiendo de la técnica que necesite cada paciente el ingreso puede ser ambulatorio o permanecer 24 horas en la clínica. La recuperación es rápida y progresiva, alrededor de una semana después, el paciente se puede incorporar a su vida normal. Posteriormente, durante el postoperatorio, hay que realizar masajes de drenaje linfático y llevar medias compresivas durante tres semanas.

Por exceso

Por el contrario, en otras ocasiones la forma de la pantorrilla es demasiado gruesa, con el efecto visual de que el gemelo parezca prolongarse hasta el tobillo. Según Federico Pérez de la Romana, esto puede deberse a que "o bien el músculo del gemelo esté muy desarrollado o que existe acumulación de grasa".

Una vez identificada la causa, en el caso que fuera motivada por exceso de grasa, se puede corregir mediante una liposucción en los tobillos. Incluso, muchas veces, se practica en toda la zona del gemelo, ya que alrededor de él suele también acumularse grasa. El doctor asegura que "con esta técnica es posible quitar varios centímetros y conseguir unas piernas esbeltas y proporcionadas".

La recuperación de esta intervención también es muy es rápida, solo hay que llevar a cabo, como en las anteriores intervenciones, una serie de recomendaciones como la realización de masajes de drenaje linfático y llevar medias compresivas durante algunas semanas.