Uno de los tratamientos que ha estado y ha despertado el interés en el Congreso de Medicina Estética, SEME, ha sido Cellfina.
Procedimiento mínimamente invasivo aprobado por la FDA que ha demostrado ser clínicamente eficaz para mejorar la apariencia de la celulitis durante al menos un año.

Este tratamiento se realiza con un aparato de reducidas dimensiones, que de manera automática y bajo la supervisión de un especialista médico, actúa sobre la zona a tratar aplicando previamente lidocaína para anestesiar y presionando como un succionador con un pequeño dispositivo del tamaño de la aguja que aplica la luz de presión rápida y repetida sobre la celulitis, dando resultados visibles desde la primera sesión.

Aprobado por la FDA

Cellfina es un procedimiento aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos, FDA por sus siglas en inglés, que es mínimamente invasivo y está diseñado para disminuir los hoyuelos en los glúteos y muslos en las mujeres adultas. La celulitis puede causar muchas alteraciones psicológicas y de no aceptación del propio cuerpo, aunque más del 95 por ciento de las mujeres la tienen. A pesar que en algunas ocasiones asociamos la celulitis con el exceso de peso, el hecho es que independientemente del peso, nivel de actividad física o el Índice de Masa Muscular, la celulitis afecta a muchas mujeres. El ejercicio y la dieta no son suficientes para eliminar la aparición de la celulitis. Así que, si se desea minimizar los hoyuelos, Cellfina es un aliado en la clínica de medicina estética.

Total satisfacción

La celulitis es causada por las bandas conectivas debajo del tejido de la piel, que fuerza la grasa a la superficie de la piel. Estas bandas apretadas bajan la piel, creando hoyuelos visibles. El mecanismo de acción de Cellfina es simple. Al romper estas bandas de grasa, la presión se liberará, minimizando así la cantidad de grasa que se está empujando hasta la piel.

Cellfina es un procedimiento mínimamente invasivo y está diseñado para disminuir los hoyuelos en los glúteos y muslos en las mujeres adultas.

Cellfina rompe la presión mediante el uso de un tamaño mínimamente invasivo, el de la aguja que rápidamente libera las bandas conectivas. El procedimiento dura unos 45 minutos.
La mayoría de pacientes pueden reanudar sus actividades normales dentro de las 24 a 48 horas.
Los resultados son prácticamente inmediatos y mejoran en el curso de seis a doce semanas. Además, los resultados pueden permanecer en el tiempo más de tres años. Según un estudio de satisfacción realizado por Cellfina, el 85% de los pacientes estaban satisfechos dentro de los primeros tres meses, 94% satisfechos en un año y 93% después de tres años.

Los efectos secundarios son mínimos. El paciente puede esperar algunos pequeños moretones, sensibilidad y hinchazón en la zona de tratamiento durante una semana. El drenaje puede estar presente durante las primeras 24 a 48 horas.









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