El Dr. Terencio de las Aguas fallece dejando un gran legado en el campo de la dermatología
El reconocido dermatólogo era persona clave en una de las grandes luchas de nuestra especialidad a lo largo de siglos: la lepra
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El reconocido dermatólogo Dr. Terencio de las Aguas era hijo único de un famoso escultor valenciano: el D. José Terencio Farré. Dedicó su vida muy especialmente a la leprologia y fue director médico del sanatorio San Francisco de Borja de Fontilles desde 1968 a 1999, aunque ya desde mucho antes había sido médico de dicha institución.
Tal y como explica su compañero de profesión, Dr. Salvio Serrano, su recorrido profesional ha sido prolífico y destacado: Académico de la Real Academia de Medicina en Valencia; experto en lepra por la Organización Mundial de la Salud; Consejero de la Sociedad Internacional de Leprología; Académico Emérito de la Academia Española de Dermatología y Venereología y Maestro de la Dermatología Ibero-Latinoamericana (CILAD). De él destaca su temperamento, su ímpetu y su compromiso con la actividad médica. Su liderazgo y conocimiento le llevó a ser considerado uno de los dermato-leprólogos más relevantes del mundo. Trabajador incansable, decía con frecuencia al final de sus conferencias: "Estudio y trabajo por los enfermos de lepra con el objetivo de erradicar la enfermedad, tratando de reparar esa injusticia milenaria que han sufrido estos enfermos, a lo largo de la historia".
Por su parte, el Dr. José Mascaró, su compañero y amigo desde hace casi 60 años, le recuerda dedicándole unas palabras, ya que "aunque tristemente era un desenlace esperado, nos ha afectado mucho a los que como yo tuvimos amistad con él e incluso hicimos muchos viajes juntos, en ocasiones con la familia".
Ha sido autor de dos libros de leprología considerados como básicos en todos los países de lengua española y portuguesa: Lecciones de Leprología y La lepra. Pasado, presente y futuro. Además, sus trabajos han sido publicados en diversas revistas internacionales especializadas. También, durante muchos años fue el director de la revista Leprologia difundida en todos los países iberolatinoamericanos desde Fontilles.
Recibió honores y nombramientos en todo el mundo. El especialista estaba muy volcado con su profesión en todos los sentidos. Impartió numerosas conferencias y participó en los congresos más importantes en los cinco continentes a lo largo de su vida, sobre todo en Asia y Latinoamérica. En 1973 fue condecorado con la Gran Cruz de la Orden de San Lázaro y en 1996 le nombraron miembro de la Real Academia de Medicina de la Comunidad Valenciana. Según asegura el Dr. Mascaró, el Dr. de las Aguas era una persona muy conocida y estimada, en gran parte por su carácter abierto con los dermatólogos iberolatinoamericanos de los que algunos, hoy en día, se han convertido en Maestros pasando por Fontilles, bajo su dirección, donde trabajó durante casi 50 años. Además, "en España lo conocíamos y apreciábamos todos", asegura.
Una gran mayoría de dermatólogos siguieron el curso de leprología que se llevó a cabo cada año en Fontilles, en el que ya al principio participaba dando clases cuando era médico adjunto y, ulteriormente, organizaba cuando fue director de la institución (desde la década de los 50 hasta los 90). En definitiva, ha sido un experto que ha contribuido al avance y conocimiento de esta área de la salud.
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